Los likes recibidos en redes sociales pueden ser tan placenteros como tener sexo. Esta fue la comparación que hizo mi amigo mientras me confesaba la minuciosa rutina que sigue al retratar su vida en redes sociales: antes de subir una foto o video piensa por varias horas cómo la recibirán sus seguidores. Esta situación me pareció exagerada hasta que comprendí que no está alejada de la generalidad de la época exhibicionista. La generación de “attention whores”, como la describió la escritora Lucía Taboada en el libro Hiperconectados, vive en un reality show narcisista en donde solo importa el “yo” y todo puede ser grabado. La pesadilla orwelliana es una realidad. El mundo videograbado en historias de menos de un minuto conocidas como instastories (y que se borran en 24 horas) se comparten diariamente abriendo la intimidad de cualquier usuario. Con un solo click puedes saber dónde, con quién está y enterarte de los sucesos de…
Reportaje publicado en portada de la revista Newsweek TEXAS, EE. UU.— La barda de acero anaranjada que separa México de Estados Unidos, en la ciudad fronteriza de Progreso —ubicada en el condado de Hidalgo, Texas—, permanece imperturbable desde 1996. Solo que en el último año, luego de que Donald Trump fue electo presidente, ha adquirido especial interés: el muro se ha convertido en una atracción turística para extranjeros y locales. Cuando en 2014 Robert Cameron decidió abrir un negocio de tours en su natal Texas, nunca imaginó que uno de los recorridos que ofrece se volvería uno de los paseos más cotizados. Ello a partir de que la ampliación del muro se volvió un tema destacado en la agenda internacional de Trump. Mientras recorre parte de los campos de caña de azúcar que colindan con el muro, el texano reflexiona, en voz alta: “¿Cómo se puede construir una barda que…
Para vencer a su contrincante al boxear en el ring, lo primero es aprender a controlarse. Esta es una de las lecciones iniciales que reciben los niños en el centro de “Rehabilitate” en Culiacán, quienes practican este deporte como parte de su proceso de desintoxicación. “Lo que la droga te quita el box te lo regresa”, asegura Guillermo Rodríguez, director de este centro quien desde hace cuatro años entrena a pacientes. “Empezamos con tres costales viejos en un cuarto muy pequeño y ahora contamos con un gimnasio grande y bien equipado”, revela Rodríguez, quien permanece rehabilitado desde hace 14 años. Cada gota de sudor derramada por el esfuerzo físico limpia la sangre que por años fue contaminada con cocaína, cristal y otros enervantes; cada golpe propinado en el cuadrilátero es el canal para descargar la furia, terror y fracaso de una vida anclada a las drogas. De los 60 pacientes que viven…