Son las 10 de la noche y la lluvia ligera mantiene húmedo el pavimento de la avenida Paseo de la Reforma. Una centena de ciclistas rodará 35 kilómetros hasta la madrugada, como cada miércoles desde hace 20 años.

El grupo concentrado al pie del Ángel de la Independencia encabeza, sin habérselo propuesto, una cultura del movimiento que se extiende por casi todas las ciudades del país.

México ha sido testigo del cambio cultural más importante en materia de movilidad en la última década. Esta manera de movilización no motorizada ha marcado una evolución. Los ciclistas urbanos se hacen notar en entornos que antes no estaban presentes.

“Eso de andar en bici es para hacerlo el domingo en el parque. Si quieres hacer ejercicio vete al bosque”, recuerda la fundadora de Bicitekas, Arely Carreón sobre las burlas que recibían cuando el ciclismo urbano era inexistente en México a finales de los noventa.

El ciclismo urbano pregona grandes virtudes y ventajas, se ofrece como un regalo para tu salud y tu cartera: No gastas gasolina y por lo tanto no contaminas, ayudas a la conservación del medio ambiente, haces ejercicio y ocupas menos espacio en las calles.

El concepto de la bicicleta en la ciudades se ha transformado hasta considerarse el transporte más efectivo para trasladarse en las horas de mucho tráfico u horas pico, de acuerdo con los resultados de un estudio reciente publicado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

En la Ciudad de México se asentó un movimiento ciclista sin precedentes.

A diferencia de otras ciudades, en la capital del país el clima y el terreno de ligera inclinación permite un uso adecuado de la bicicleta como transporte, lo que ha generado un boom de ciclistas y ha abierto un nicho en la venta de accesorios y nuevos talleres.

En 2016 a nivel nacional se fabricó un millón de bicicletas y en 2017 se proyecta que la producción crezca 10 por ciento más.

A pesar de este boyante movimiento urbano, los reglamentos de tránsito no son muy claros. Cada año, al menos seis ciclistas mueren en accidentes debido a la falta de cultura vial.

 

VEINTE AÑOS RODANDO.

El Paseo Nocturno de Bicitekas fue el primero que surgió en el país en 1998. Al ser los pioneros en Rodadas nocturnas, Bicitekas ha enseñado a muchos otros colectivos ciclistas a proteger y guiar su propio pelotón. Se convirtió en un escuela cultural que mostró el hábito de formar ciclistas urbanos.

Hasta el día de hoy se mantiene como una actividad para conocer personas y ganar confianza, para andar en bici por la noche o en condiciones adversas con lluvia y calles inundadas.

“El objetivo es que los automóviles nos vean y nos reconozcan. Enseñarle a la gente que tenemos que convivir con los automóviles y ellos con nosotros y con el peatón”, relata Raúl Alba, organizador de la Rodada Nocturna desde hace una década.

En efecto, toman la calle. La centena de ciclistas ocupa un carril completo de Paseo de la Reforma, sólo una patrulla escolta la retaguardia del contingente.

La ruta es siempre sorpresa y es anunciada horas antes de dar el banderazo de salida. Esta noche se dirigirán a Lindavista pero muchos no saben cuál será el camino, únicamente conocen el destino.  

Jennifer Sánchez Fernández, de 21 años es una de las ciclistas más jóvenes de esta rodada. Hace un año compró su bicicleta y considera que salir a andar con cientos de ciclistas más es una forma de convivencia.

“Me parece muy importante participar en este tipo de actividades. Sobre todo siendo mujer porque como mujeres debemos incluirnos en actividades que son consideradas de ‘hombres’”, afirma la joven estudiante.

Inspirados en las rodadas organizadas en el contexto del movimiento ciclista en San Francisco, crearon el Paseo Nocturno con tan sólo con cuatro personas como participantes.

“Era una reunión muy divertida, a la que acudíamos después del trabajo. La gente nos empezó a seguir, empezaron a llegar por interés, porque era una cosa nueva, loca y muy divertida”, relata Arely quien acaba de ser nombrada la Alcaldesa de la Bicicleta.

En la Calzada Guadalupe la patrulla que los acompañaba no está más en la retaguardia del contingente. Los charcos que el aguacero previo dejó inhabilitan dos carriles de la avenida. Entre gritos y señas el pelotón se compacta en un solo carril. Todos permanecen juntos y ahí hallan su fortaleza.

Las rodadas nocturnas se han popularizado en la capital, hay de todo y para todos.

Coinciden en que la bicicleta debe verse y utilizarse más como un medio de transporte en la urbe y no sólo como una forma de recreación. Incluso, muchos consideran la bicicleta como una herramienta para hacer política.

Actualmente existen más de 50 grupos ciclistas que organizan paseos en las noches desde distintos puntos de la ciudad. Hay para todos los gustos y características.

Los jueves el grupo Desarrollo Suave ofrece rutas con un nivel poco complicado para los que se inician en el ciclismo. Este colectivo arranca su recorrido a las 8pm desde el Monumento a la Revolución.

Si eres mujer y te gusta andar en tacones, esto no es impedimento para subirte en una bicicleta en la noche. Desde el Monumento de la Diana Cazadora decenas de mujeres en tacones se reúnen para salir a las 9 de la noche. La Asociación Civil Mujeres en Bici, surgió en 2009 con el propósito de promover la seguridad de las mujeres ciclistas.

People for Bikes es un colectivo ciclista que gusta de tomar las calles de noche. Salen todos los jueves (Excepto el último de mes), desde la colonia Roma a las 8:30 de la noche. Este grupo considera que las Rodadas Nocturnas “Aumentan la presencia de la bicicleta en la vida cotidiana, y brindan una plataforma segura al ciclista que quiere empezar a rodar de noche”.

 

EN LAS ENTIDADES TAMBIÉN.

La idea de organizar Paseos Ciclistas Nocturnos fue tan atractiva que se institucionalizó exitosamente en diferentes ciudades del país y de esta manera aumentó la inversión para infraestructura ciclista.

El grupo Mountain Bike es conocido desde hace cuatro años por sus paseos nocturnos que incluyen niños y jóvenes. La montañosa orografía de la ciudad veracruzana de Misantla no es impedimento para que el pelotón ruede toda la noche.

En la capital de este estado, otra vuelta en la noche se organiza con el objetivo de  alejar a los veracruzanos de los vicios.

En Guadalajara desde junio de 2007 se inauguró el Paseo Popular Nocturno en Bicicleta, lo que marcó el inicio de una segunda etapa de reivindicación social. Actualmente en el estado de Jalisco existen 60 grupos ciclistas que organizan diversas actividades para fomentar el uso de la bicicleta en las ciudades.

Las Rodadas Nocturnas también se han utilizado como bandera de inclusión social para personas con capacidades diferentes.

La organización BiciSordos Incluyentes fue creada en 2012 por Alejandro Márquez, quien utilizó su falla auditiva para unir a ciclistas sordos. En un arriesgado intento por tomar las calles, ocho ciclistas rodaron 15 kilómetros un domingo. Actualmente son 70 personas las que conforman este grupo y salen a rodar de noche desde la Ciudad de México a lugares como Tepoztlán u otros sitios fuera de la capital.

En Tlaxcala el pedalista chileno, Marcel Mathew optó por organizar una rodada nocturna para combatir el autismo, el objetivo era visibilizar esta problemática y concientizar a la población al respecto.

 

EL NEGOCIO DE LA BICICLETA.

La industria entorno al uso de la bicicleta ha tenido un boom aunque no siempre positivo para la economía nacional.

La entrada de productos extranjeros, principalmente chinos, ha impactado negativamente en las fábricas mexicanas de bicicletas hasta verse obligadas a cerrar. Tan sólo en 2015 tres empresas mexicanas dejaron de operar en el país, Bicicletas Ozeki, Bicicletas Turbo y Giro Bicicletas.

Actualmente aún existen 15 empresas dedicadas a la fabricación de bicicletas, que aglutinan el 80 por ciento del mercado nacional y generan 5 mil trabajos directos, de acuerdo con datos proporcionados por la Asociación Nacional de Fabricación de Bicicletas (Anafabi).

No obstante, la industria de fabricación de bicicletas en México se ve amenazada por productos de importación que han innovado en este mercado.

Desde Nueva Zelanda llegó a México la Yike Bike la primera bicicleta eléctrica abatible y portátil que permite la transportación como si fuera una mochila. El centro de distribución se encuentra en la colonia Roma.

De igual forma, los convertidores eléctricos también son importados. Desde 2012 estos equipos que permiten alcanzar velocidades de hasta 30 kilómetros por hora se traen de Estados Unidos.

Para Alberto Daniel Moreno, dueño de una planta en Tlalpan, la tendencia a buscar bicicletas con motores eléctricos reduce las ventas que talleres como el suyo puedan tener.

Expertos en negocios coincidieron que la creciente tendencia en el uso de la bicicleta abre paso a negocios nuevos que ofrezcan experiencias y no sólo la compra de la bici per sé.

Un ejemplo es la tienda-taller ¨People for Bikes¨ que además de ofrecer accesorios y bicicletas, también cuenta con un taller y con una vasta comunidad de ciclistas que organiza rodadas y otros eventos. En esta tienda se puede vivir una experiencia completa que no termina en la compra de la bicicleta.

La tendencia del consumo apunta hacia lo artesanal y los modelos personalizados, en este tenor surgen proyectos empresariales como BambooCycles, bicicletas auto-sustentables construídas con bambú.

Dentro de lo chick en ciclismo existen modelos de personificación, la empresa Roda Moda ubicada en Querétaro permite al comprador escoger el tipo de bicicleta, diferentes modelos de canastillas, color, silla para bebé y formas de faro, entre otros. Esto lo puedes hacer de manera virtual a través de su página web y ahí mismo observar el resultado a tu medida.

Las expectativas del uso y compra de bicicletas en México se observan promisorias. De acuerdo con datos de Euromonitor International para 2019 la penetración de la bicicleta alcanzará un 20 por ciento de los hogares.

 

LA ECOBICI.

El sistema de bicicletas públicas está presente en 350 ciudades a nivel internacional. El primer país en instituir este servicio fue Francia en 1997 y desde entonces se ha expandido en el mundo.

En México, Ecobici arrancó en 2010 con 86 cicloestaciones y desde entonces no ha dejado de cesar como sistema exitoso de transportación urbana. Guadalajara es la segunda ciudad en la que se estableció el sistema de bicicletas y en 2016 se anunció la inversión de 309 millones para extender con 57 kilómetros adicionales la ciclovía.

El 17 por ciento de los 6 mil usuarios de Ecobici dejó el automóvil para empezar a andar en bici. Una forma de movilidad no motorizada que representa una opción viable de transportación en la ciudad.

“Hemos llegado a un público que generalmente tenía grandes prejuicios contra el uso de la bicicleta, veían la bici como una opción de movilidad sólo para pobres y con estas bicicletas sofisticadas con una tarjeta electrónica nos ayudó a que muchos capitalinos que veían con desdén a la bicicleta la probaran”, comentó en entrevista Arely Carreón, recién nombrada Alcaldesa de la Bicicleta y fundadora del grupo Bicitekas.

La innovación más reciente del sistema Ecobici es la introducción de bicis asistidas con energía eléctrica. Son los primeras 340 bicicletas hechas en el país con tecnología mexicana, pensadas para personas mayores que requieren más fuerza para hacer sus recorridos y llegar más lejos dentro de la ciudad.

Una de las demandas más recurrentes es que el sistema de servicio Ecobici se extienda a otras delegaciones.

Diariamente en la Ciudad de México se registran 130 mil viajes en bicicleta en los 170 kilómetros de ciclovía.

Los activistas coincidieron en la necesidad de contar con una Ley General de Seguridad Vial que establezca responsabilidades al Gobierno Federal y a los gobiernos locales para asegurar la protección de los ciclistas.

De acuerdo con el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP, por sus cifras en inglés) las calles de las ciudades concentran el 93 por ciento de los accidentes viales. Estas muertes representan la segunda causa en la población joven de 15 a 29 años.

Al año en la Ciudad de México mueren seis ciclistas en accidentes viales, de acuerdo con cifras de la Secretaria de Movilidad de la Ciudad de México. 2015 fue el año más crítico con un total de 19 muertes. En lo que va del 2017 ya se registraron tres fallecimientos de ciclistas.

Con el objetivo de reducir en un 35 por ciento los fallecimientos de ciclistas por accidentes viales, en 2018 la Secretaría de Movilidad (Semovi) pondrá en operación el Programa de Reducción de Hechos de Tránsito para Ciclistas y Motociclistas.

El uso cotidiano de la bicicleta ha roto tabús, se ha inscrito en la vida cotidiana de los ciudadanos alcanzando avances que hace dos décadas era inimaginables. Hoy la revolución cultural avanza sobre ruedas de noche y en condiciones de seguridad adversas.

 

Write A Comment